La Colección Luis Alba es sin duda una de las recopilaciones más extensas y valiosas de material documental que existen sobre una ciudad concreta en España y probablemente en Europa. Es el fruto de una vida dedicada a la búsqueda de todo aquello relacionado con Toledo -fotografías, objetos, documentos, carteles, recuerdos y un sinfín de curiosidades más- en una época en la que no existía internet y en la que la adquisición de todo este material requería un enorme esfuerzo para recorrer los mercadillos, anticuarios, ferias, subastas y ofertas de particulares en los que pudiera encontrarse algo de valor relacionado con la ciudad.
Por suerte para los toledanos y para los amantes de la historia en general, y tras un largo proceso iniciado en 1999, en 2007 dicha colección fue adquirida por el Ayuntamiento de Toledo. Desde entonces se encuentra en proceso de catalogación y digitalización -una tarea que requiere un trabajo ingente que durará años- en el Archivo Municipal que dirige Mariano García, el cual está realizando una encomiable tarea en la divulgación de la gran cantidad de material histórico que conserva el archivo. Sin duda, la accesibilidad documental para la ciudadanía es una de las bases donde debe asentarse el interés y el amor por la historia de Toledo de las generaciones más jóvenes y las venideras.
Esa tarea de digitalización de la inmensa colección de Don Luis Alba va poco a poco dando sus frutos que el Archivo Municipal incluye en su web. Recientemente ha incorporado una colección de fotografías de autor anónimo datadas en junio de 1905 y que constituye un impresionante repaso de la ciudad en esos primeros años del siglo XX.
Veamos esta serie de fotografías con un cierto detenimiento, comenzando por las tomadas en la Plaza de Zocodover, donde estaba instalado aquellos días un cinematógrafo:
Cerca de allí, en la cuesta de las Armas, en el comienzo de la subida al Corral de la Campana por la Calle Recoletos, fue tomada probablemente una de las primeras fotografías en las que podemos ver una manguera municipal de riego. El agua debía provenir de Tajo mediante la elevadora de aguas, pues aún faltaban muchos años para la llegada del agua potable universalizada a la ciudad desde el Torcón (1948).
En la Calle Gerardo Lobo también se inmortalizó a un empleado municipal con la manga riega. Es sorprendente -y lamentable- comprobar que en 1905 esa calle presentaba un arbolado infinitamente más numeroso que el existente en nuestros días:
Este fotógrafo anónimo retrató algunos deliciosos rincones y callejones de la ciudad. Aquí tenemos preciosas fotografías por este orden del Callejón de Gigantones, del Callejón de Bodegones, de la Cuesta de Agustín Moreto y de la Cuesta del Águila -donde estaba el estudio fotográfico de Compañy-.
Aquí tenemos más típicos rincones toledanos como son la Calle de Trastámara, el Callejón de San Ginés y Calle de la Sinagoga:
Esta bella imagen nos muestra la atividad alrededor de la fuente de la Plaza del Padre Juan de Mariana:
En la misma plaza se sitúa la Iglesia de San Ildefonso o los jesuítas:
Uno de los lugares más transitados de la ciudad era -y es- la Plaza de las Cuatro Calles, aunque más que una plaza es una intersección de cinco calles, o seis, si contamos la Cuesta de la Sal:
En aquellos días el Tajo era aún fuente de vida y riqueza, pero también de solaz y recreo. Aquí tenemos fotografías de molinos y de barcas, y también de las riberas, donde de ven bien los chopos y fresnos que eran anualmente desmochados para usar sus hojas como alimento del ganado.
Siguiendo con el agua, son de un enorme valor documental estas imágenes donde aún pueden verse funcionando en la vega y en los alrededores de Toledo algunas norias -cuyo origen es árabe- para la extracción de agua de riego.
Las huertas rodeaban la ciudad en la zona de las vegas. Este chozo estaba en la Huerta de San Pablo, cerca de la Puerta del Vado:
Como no podía ser menos, una fotografía está tomada en la Calle de Santo Tomé:
Aquí esta retratada la Basílica del Cristo de la Vega:
En estas estampas tenemos retratado el Ayuntamiento.
En la Plaza Mayor -que paradójicamente no es la más grande de la ciudad- quedaron inmortalizados unos vendedores. En la primera fotografía podemos ver en obras el mercado de abastos, que no fue finalizado hasta 1912. Este edificio que pronto cumplirá un siglo tuvo una construcción muy dificultosa por deficiencias en el proyecto y problemas económicos:
Aquí tenemos unas preciosas fotografías de la vida de comienzos del siglo XX en el Paseo del Miradero:
El Paseo de Merchán o de la Vega también fue fotografiado, y podemos ver en él la Casita de Corcho.
Muy cerca de este parque fue fotografiada esta estructura muy desconocida, conocida como Quiosco de la Montaña:
Es sensacional este grupo de fotografías de la Mezquita del Cristo de la Luz, incluyendo su inscripción fundacional que había sido descubierta seis años antes, en 1899:
En esta fotografía podemos ver la Puerta de Bisagra:
Aquí tenemos un buen grupo de fotografías de San Juan de los Reyes. La primera fotografía es tal vez en la que mejor se aprecie el acceso existente a modo de adosado en el ala oeste, y que fue demolido pocos años más tarde:
Aquí podemos ver la Sinagoga de Santa María la Blanca:
Esta es la Casa de Mesa:
En esta estupenda fotografía se puede observar la Diputación Provincial, el Paseo de Recaredo a sus pies y, entre medias, la muralla. Puede observarse a la izquierda en la muralla el torreón rectangular que desapareció más tarde y que ha sido recientemente reconstruido en su base al haberse constatado su importancia en la sujeción de este lienzo que se vino abajo con las lluvias del año pasado:
Aquí tenemos la Puerta del Cambrón:
Esta es una fotografía de la Puerta del Sol:
Esta serie de imágenes es del Puente de San Martín:
El otro puente medieval, el Puente de Alcántara, también quedó inmortalizado:
Esta imagen corresponde al patio del Alcázar:
Esta es una vista del Paseo del Tránsito:
Esta es una serie de imágenes tomadas en la Catedral:
Esta es la vista del Valle que podía contemplarse desde el Alcázar en 1905:
Aquí tenemos fotografiado el Seminario desde el Convento de San Pablo:
La Posada de la Sangre no pasó desapercibida para este estupendo fotógrafo anónimo:
Muy cerca de allí, el Hospital de Santa Cruz también recibió la visita de este grupo de personas:
No podía faltar una serie de imágenes del Hospital Tavera:
Aquí podemos ver el Castillo de San Servando:
Aquí tenemos el Instituto Universitario Lorenzana:
En esta fotografía podemos ver la preciosa Plaza de Santa Isabel:
Este es el Convento de las Capuchinas o de la Purísima Concepción:
No falta tampoco una fotografía del impresionante Convento de Santo Domingo el Real:
Una curiosa fotografía de esta serie nos muestra a uno de los personajes del grupo en un estudio disfrazado de picador:
Por último, y a modo de pequeño homenaje a este anónimo fotógrafo que tan bien retrató el Toledo de 1905, aquí le tenemos inmortalizado en una preciosa fotografía en los cerros que circundan la ciudad. La sombra de la cámara y de sus compañeros convierten esta imagen en una toma realmente especial:
Sirva esta entrada de humilde homenaje a Luis Alba, sin cuya labor recopilatoria la práctica totalidad de su colección habría terminado dispersa por el mundo, olvidada y en muchos casos destruida. El mérito de su labor se agiganta según se va descubriendo poco a poco la dimensión de la colección, la rareza y el valor de muchos de sus elementos. Finalizar tan sólo agradeciendo al Archivo Municipal la cesión de estas fotografías.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
10 comentarios
Muy buena Edurado. Unas fotos preciosas, como de costumbre. Mendua base de datos que debes tener ya!!!!
Me han gustado mucho todas.
Me ha llamado la atención el hombre del bigote, el niño y el perro que sal en muchas de las fotos. ¿Serían acompañamntes del fotógrafo?
Una puntualización. ¿Estás seguro que la foto que pones como vistas desde la Torre de la Catedral son desde allí? No sé si me equivoco, pero por la perspectiva de San Justo y San Juan de la Penitancia yo diría que está sacada más bien desde el Alcázar.
Un abrazo!
Este blog cada vez me gusta más. Genial el trabajo realizado.
Saludos.
Eduardo: Muchas felicidades por tu magnífico trabajo. Y quería agradecerte la oportunidad de poder "darme una vuelta por Toledo".
Llevas toda la razón querido Kunzuilh. La vista está tomada desde el Alcázar. A ver si lo corrijo. Abrazos y gracias a todos.
Me tiene totalmente intrigado la vista de la Calle Trastamara, que no consigo identificar.
¿Seguro que es Trastamara?
Por cierto, enhorabuena por el trabajo y gracias por compartirlo con el resto de la humanidad
Te felicito por este magnífico blog, y personalmente te agradezco esta labor monumental que estás llevando a cabo, porque facilita el trabajo a los profesores que buscamos imágenes para las clases. Un saludo desde Barcelona.
Muchas gracias a todos. La foto de la Calle Trastámara está tomada desde el final de la placita que se forma. La esquina que se ve es donde hoy día existe una carpintería y a la derecha se sitúa lo que durante muchos años ha sido el bar "Callejón del Gato". Tal vez al estar hoy lleno de coches te cueste reconocer el lugar, pero es ese con certeza.
Abrazos.
Buenísima entrada. Veo tus entradas desde hace bastante, pero no paro de sorprenderme. Increíbles fotografías y excelente documentación
muy interesante el articulo, mi enhorabuena sigue asi
Me ha encantado.Reconozco muchos parajes de mi infancia. Muchas gracias
Publicar un comentario