La primera noticia documental referida a esta sorprendente iglesia data del año 1150, cuando se cita un incendio en ella. Parece ser que fue reedificada en el propio siglo XII y lo que no está claro es que anteriormente existiera allí una mezquita, como sostienen algunos autores. Sin embargo, sí han aparecido en ella algunas piezas muy bellas de decoración visigótica.
Del templo edificado en el siglo XII, de estilo mudéjar, nos han llegado la parte inferior de la torre, las dos portadas -bellísima sobre todo la principal, con arco de herradura enjarjado, con alfiz y coronada en su parte superior por una serie de pequeños arcos polilobulados- y un soberbio arcosolio descubierto en 1912 y que sirvió de enterramiento a un noble llamado Alfonso en 1305.
Pero la parte más suntuosa de la iglesia de San Andrés corresponde a la reforma gótica que mandó construir Francisco de Rojas, nacido en Toledo en 1446, que fuera embajador de los Reyes Católicos en Italia y Bretaña. Su principal intención con el encargo de la reforma de San Andrés era construir el más digno enterramiento para sus padres, Alonso Cáceres de Escobar -fallecido en 1475- y Mariana de Rojas. Inicialmente se proyectó este enterramiento en el Convento de Santa Fe, pues el padre era caballero de la Orden de Santiago, pero finalmente fue San Andrés el destino de esta excelsa obra de todo un genio: Enrique Egas. Las similitudes con la cabecera de San Juan de los Reyes son evidentes, como es lógico en un discípulo de Juan Guas, que además era hijo de Egas Cueman, encargado de gran parte de la decoración de ese portentoso monasterio.
El encargado de de dirigir las obras fue el propio hermano de don Francisco, Alonso de Escobar y Rojas.
La capilla funeraria se ejecutó en 1504 ocupando los terrenos de una vivienda aneja a la iglesia que fue comprada a tales efectos. Para no interferir con el culto de la iglesia, se tapió la obra con un muro de separación provisional, que fue retirado al finalizar la misma con gran disgusto para Enrique Egas ya que fue entonces cuando comprobó que su capilla gótica había sido mal orientada, pues pese a seguir la línea del eje central de la iglesia primitiva, ésta no era un rectángulo perfecto -un lateral era mayor que el otro- por lo que la nueva terminación gótica quedó para siempre ligeramente descuadrada del resto del templo.
El ábside central está rematado con una gran cruz gótica idéntica a la de San Juan de los Reyes, y bajo ella se sitúa un primoroso retablo de Juan de Borgoña y de Francisco de Comontes.
Toda esta nueva obra gótica quedó separada de la iglesia antigua por una reja ejecutada por Juan Francés, la cual fue retirada en junio de 1804 para ser vendida a la Iglesia de San Vicente, donde fue colocada en el pórtico.
En los siglos XVII y XVIII se hicieron restauraciones y reformas de la parte antigua de la iglesia y se construyó el pórtico que hasta 1975 ocultaba la portada mudéjar (un ejemplo más de una obra de "climatización" realizada durante la Pequeña edad del Hielo en un edificio construido durante en Óptimo Climático Medieval). También se añadió el remate de la torre y el hermoso cimborrio, ambos de ladrillo.
Las fotografías más antiguas de la Iglesia de San Andrés corresponden a mediados del siglo XIX. En esta de 1857 tomada por Charles Clifford -ampliada y recortada- puede verse la iglesia desde el Valle:
En 1872 Jean Laurent volvió a fotografiarla desde el Valle. Lamentablemente aparece semioculta por la mole del Seminario. Como veréis, este inmenso edificio aparece en ruinas debido al abandono de las obras iniciadas en 1831. Tras cinco años de obras, se paralizó el proyecto a la muerte del Cardenal Inguanzo, desmantelándose muchos materiales y todas las maderas que ya habían sido colocadas, siendo aprovechadas en el Alcázar y en la restauración de murallas. Hasta 1886, tras 50 años de abandono, no se retomaron las obras por mediación del cardenal Payá, inaugurándose en 1889:
El interior de la Iglesia de San Andrés también fue fotografiado en el siglo XIX, tanto por Casiano Alguacil como por Levy, destcando las fotografías de los sepulcros de Alonso Cáceres y Mariana de Rojas, los padres de Francisco de Rojas:
Esta es una imagen del exterior de la iglesia a comienzos del siglo XX:
Aquí tenemos varias imágenes tanto del interior como del exterior tomadas en los inicios del siglo XX:
Aquí podemos ver el pórtico que ocultaba la portada mudéjar poco antes de ser retirado en la restauración de 1975, así como otras fotos tomadas del entorno de la iglesia en los años 70:
Aquí tenemos fotografías de esta restauración de 1975:
En esta restauración aparecieron elementos visigóticos: una placa-nicho incrustada en el exterior junto a la portada (que fue trasladada al Museo de los Concilios), una pilastra y un cimacio:
Pero tal vez lo más sorprendente y desconocido de la Iglesia de San Andrés son las momias existentes en su cripta. Pocos son los privilegiados que han podido contempalras en estos siglos. Uno de ellos es el genial fotógrafo José María Moreno, quien tuvo la suerte de fotografiarlas el 1 de junio de 1974:
Este era su estado en febrero de 2001:
Otra de las particularidades que hacían interesante la Iglesia de San Andrés a los primeros fotógrafos era la primorosa imagen de la Dolorosa de Pedro de Mena. Esta imagen fue trasladada posteriormente al Museo de la Iglesia de San Vicente y actualmente se encuentra en el Museo de Santa Cruz. Fue fotografiada en San Andrés desde el siglo XIX o comienzos del XX:
En el año 1987, al realizar unas obras en unas dependencias del Arzobispado de Toledo, pegadas a la iglesia, se descubrió una arquería que partía del muro perimetral sur de la iglesia. Resultó ser el claustro mudéjar de la Iglesia de San Andrés. Fue excavado de urgencia entre los días 23 de junio y 17 de julio de 1987 por Clara Delgado, que lo dató como construido en la segunda mitad de siglo XII. Fue este descubrimiento muy importante por no ser habitual que las parroquias toledanas tuviesen claustro. Se desconoce su función y si tenía relación con algún tipo de práctica de alguna orden religiosa o militar. En esa época el respeto al patrimonio aún era menor al que se tiene hoy en día y el claustro fue demolido sin más:
La iglesia sigue actualmente restaurándose poco a poco. En estas imágenes de José María Moreno os podéis hacer una idea del avance de los trabajos en los últimos años:
Para finalizar, tan sólo dedicar esta entrada a Kászon Kovacs que fue quien amablemente me lo solicitó. Espero que haya servido para que todo el mundo conozca un poco más esta joya toledana.
La Iglesia de San Andrés en Google Maps:
Ver Toledo Olvidado en un mapa más grande
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