Precisamente he esperado a hoy para mostraros estas imágenes, pues forman parte de una visita realizada por Lluch a Toledo en aquel año de 1978 en que nuestra Carta Magna nació, por lo que esta entrada será un retrato en imágenes de nuestra ciudad en aquel periodo que espero resulte de vuestro interés.
Han pasado 46 años desde entonces y lo cierto es que es tiempo suficiente como para apreciar bastantes cambios en la ciudad, si bien la mayoría de los enclaves retratados son perfectamente reconocibles. Los cambios son más perceptibles en los detalles: las indumentarias de las personas que aparecen, los coches que circulaban por entonces, el estado de las fachadas de muchos de los edificios... en definitiva, modificaciones evidentes pero no sustanciales que estoy seguro de que disfrutaréis escudriñando. Comenzaré por enseñaros las imágenes de la plaza de Zocodover, en la que vemos como curiosidad que en el local luego ocupase Caja Toledo (hoy Unicaja) se ven los carteles de "liquidación por cierre" del comercio textil de la Viuda de Talavera:
Esta foto de un grupo de jóvenes amigos en la calle es una delicia:
La plaza del Conde presentaba este aspecto con su palacio de Fuensalida:
Estas son imágenes de la judería: sus calles, sus parques, sus sinagogas, sus museos... 
La Catedral Primada tenía este aspecto en aquel año de 1978:
El Paseo del Miradero, que había sido reformado para albergar la galería comercial, presentaba esta imagen llena de árboles que, por desgracia, no prosperaron. En nuestros días, este amplio espacio no es disfrutable por la ciudadanía debido a que está ocupado mayoritariamente por un seto de boj del que no pongo en duda su belleza, pero que suele estar seco en buena medida (una especie así no soporta el pleno sol de los estíos castellanos) y además impide que se pueda aprovechar uno de los pocos grandes paseos existentes en nuestro centro histórico, por lo que la ciudad debería replantearse una remodelación de este lugar: 
Aquí os dejo estampas de algunas preciosas calles del centro de Toledo en 1978:
El convento de Santo Domingo el Real:
El Hotel Castilla, con sus paramentos y colores originales, antes de la incomprensible remodelación que lo convirtió en un ridículo edificio asalmonado:
La Posada de la Hermandad:
La iglesia de San Justo y su plaza:
La puerta del Cambrón y sus inmediaciones:
El monasterio de San Juan de los Reyes:
El museo de Victorio Macho en Roca Tarpeya:
Varias vistas panorámicas de la ciudad en 1978:
El Castillo de San Servando:
El Alcázar y sus alrededores:
La Puerta del Sol:
La mezquita del Cristo de la Luz:
El instituto o palacio universitario del Cardenal Lorenzana:
El Cristo de la Vega:
El Hospital Tavera:
El Hospital de Santa Cruz:
Algunas de las torres y cúpulas de las iglesias de la ciudad:
El Cristo de Santo Tomé:
La plaza del Ayuntamiento:
Varios patios toledanos: 
La plaza de Abdón de Paz:
Los puentes medievales sobre el Tajo:
Una bonita aldaba:
Con el deseo de que os haya gustado esta entrada que nos da un fiel reflejo de cómo era Toledo en el año en que nuestra actual Constitución Española entró en vigor, me despido hasta la próxima entrega. 