En esta ocasión os mostraré los daños sufridos en otros edificios dispersos por la ciudad y que pasaron más inadvertidos por la dimensión militar que tomó el asedio del Alcázar.
En algunas ocasiones los destrozos se debieron a daños colaterales del bombardeo del Alcázar debido a la falta de puntería o a combates por la toma de posiciones cercanas y en otras se debieron a actos premeditados contra edificios religiosos.
En el primer grupo se puede incluir la Iglesia de la Magdalena, muy cercana al Alcázar y que quedó casi completamente en ruinas debido a los bombardeos, a las minas y a los combates.
Muy cerca también del Alcázar, el Hospital de Santa Cruz (hoy museo) también padeció al ser cuartel de tropas republicanas y recibir por ello disparos desde el Alcázar y daños en su interior contra obras de temática religiosa.
Tal vez el primer monumento damnificado cronológicamente fue el Convento de Los Carmelitas, que fue incendiado por alojar nidos de ametralladora en los primerísimos días de la contienda, cuando los nacionales aún controlaban la ciudad y no se habían encastillado en el Alcázar:
El Palacio de Benacazón también se vio afectado.
En el apartado de daños intencionados contra edificios religiosos comenzaremos viendo imágenes del estado en que quedó el Convento de San Juan de la Penitencia tras ser incendiado.
También sufrió daños el magnífico sepulcro del Cardenal Tavera, cuyo rostro fue desfigurado durante el tiempo que fue cuartel de las tropas nacionales.
Unos meses antes, también en Tavera las tropas republicanas cortaron un cuadro de El Greco:
También en Tavera se dañaron imágenes como este cristo que fue decapitado.
El Convento de San Clemente también sufrió importantes daños producto de bombardeos republicanos entre 1937 y 1938, después de la liberación del Alcázar:
El Convento de la Concepción también fue objeto de graves destrozos.
En el mismo convento apareció esta imagen con pintadas de la F.A.I.
En Santa Isabel se destrozó este impresionante grupo escultórico del Siglo XIII.
En la Catedral se procedió a la incautación del Tesoro como prueba este documento.
Los lienzos de la Sacristía ya habían sido descolgados, pero finalmente se salvaron.
Y en la iglesia de San Miguel, como ya os mostré en otra entrada, se profanaron tumbas y se esparcieron los restos por el suelo.
Los edificios civiles también sufrieron graves daños y debió perderse mucho patrimonio en las viviendas destruidas por la guerra.
Enlaces interesantes para saber más:
- REALIDAD Y PROPAGANDA: EL PATRIMONIO ARTÍSTICO DE TOLEDO DURANTE LA GUERRA CIVIL
- EXPOSICIÓN "TOLEDO, CIUDAD MÁRTIR"
- Artículo de Rafael del Cerro Malagón: “El Comité de Defensa del Patrimonio en Toledo durante la Guerra Civil” publicado en el número 1 de Archivo Secreto del Ayuntamiento de Toledo (2002).
¡¡¡¡PUTA GUERRA!!!!
ResponderEliminarEsto es una jodida aberración, ya me has puesto de mala leche...
Respiremos, respiremos, uff, uff...
Es parte de nuestro historia, los hechos son los hechos y las pruebas están ahí, no nos podemos olvidar de lo que paso, tratemos de vivir en paz , ok?
Ese es el objetivo Chule, que seamos conscientes de lo que conlleva una guerra para que nunca más se repita. Al ver esto no creo que nadie pueda desear otra, por mucho que a veces parezca lo contario. Sólo el conocimiento del pasado hace no volver a cometer errores similares.
ResponderEliminarAbrazos y siento el sofocón (tómate un cropán a mi salud :-) )
Magnifico trabajo Eduardo. Además de esos dos enlaces que indicas existe un interesante articulo, de Rafael Juan del Cerro Malagón, titulado "El comité de defensa del patrimonio en Toledo durante la guerra civil". Esta disponible para quien guste en la web del Ayuntamiento (http://www.ayto-toledo.org/archivo/revista/as1/04.pdf)
ResponderEliminar¡¡Muchas gracias!!
ResponderEliminarInteresantísimo artículo que, obviamente, queda añadido a la lista de recomendaciones en esta entrada del blog.
Abrazos.
Enhorabuena por este escalofriante post.
ResponderEliminarUn saludo