lunes, 31 de diciembre de 2012

El Casiano Alguacil más desconocido: la colección del Museo del Traje

La obra de algunos de los genios de los primeros años de la era fotográfica se encuentra por desgracia muy disgregada y esparcida por el mundo en museos, colecciones y archivos públicos y privados. Considero una obligación de los que nos interesamos por este patrimonio intentar aglutinar en la medida de lo posible la obra de estos pioneros al menos en lo referente a colecciones digitales.
Uno de los casos más representativos de archivos disgregados es el de Casiano Alguacil Blázquez, natural de Mazarambroz y que fue el más grande fotógrafo que dio España en el siglo XIX.
Su obra se encuentra esparcida en colecciones y archivos como el Archivo Municipal de Toledo, el de la Diputación, la colección Alinari de Florencia, el Courtauld Institute de Londres, el Museo D´Orsay de París y numerosas colecciones de particulares a lo largo del mundo.
Una de las más desconocidas y valiosas porciones de su obra es la existente en el Museo del Traje -Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico- y que el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte acaba de digitalizar para alegría de los que amamos la obra del genio de Mazarambroz.
Paso a mostraros estas casi cincuenta imágenes, tomadas aproximadamente entre 1875 y 1880 en su mayoría, y que en algunos casos son absolutamente desconocidas para el gran público.
Las más llamativas y destacadas son las que muestran la Plaza de los Tintes y su entorno, pues dejan ver en parte las hasta la fecha únicas fotografías antiguas que se conocen de la casa que habitara Cervantes -propiedad de la familia de su esposa Catalina de Palacios y Salazar-, hallazgo documental recientemente dado a conocer por Jean Passini y Mariano Calvo, que a buen seguro se alegrarán de ver estas desconocidas fotografías. En esta primera toma es la casa de la izquierda:
Plaza de los Tintes hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Aquí, en una toma inversa, se la ve en parte a la derecha:
Plaza de los Tintes hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Un poco más arriba se situaba esta casa dedicada a la venta de vino. Se trata de la célebre Casa de la Galera, durante muchos años sin identificar y que en ese mismo estudio fue localizada, debiéndose su nombre a su extraña forma de barco o galera:
Entorno de la Plaza de los Tintes hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Mariano Calvo también sostiene que esta portada de la Plaza de la Bellota es la casa del Lazarillo de Tormes:
Purtada señorial en la Plaza de la Bellota hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Otra imagen sensacional y sorprendente es esta vista de una casi irreconocible Plaza de Valdecaleros, con la Torre de Santo Tomé al fondo:
Plaza de Valdecaleros hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Esta es la Calle del Sacramento:
Calle del Sacramento hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Muy cerca de allí, la Plaza de las Fuentes:
Plaza de Las Fuentes hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Una placa en la Capilla de Santa Catalina de la Iglesia del Salvador:
Placa en la Capilla de Santa Catalina de la Iglesia del Salvador. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Esta es la iglesia de San Justo:
Iglesia de San Justo hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

La preciosa iglesia de San Sebastián:
Iglesia de San Sebastián hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Esta empinada calle, difícil de identificar, muestra la que tal vez sea una de las primeras vistas de una calle de la ciudad en un día de nieve:
Una calle de Toledo tras una nevada hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Aquí tenemos la portentosa portada de la calle Recogidas, 1:
Portada señorial en la Calle Recogidas hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Estas fotografías muestran detalles del Monasterio de San Juan de los Reyes:
Claustro de San Juan de los Reyes hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte
Claustro de San Juan de los Reyes hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte
Claustro de San Juan de los Reyes hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Aquí vemos el Hospital de Santa Cruz:
Hospital de Santa Cruz hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte
Detalle del Hospital de Santa Cruz hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Este es un precioso detalle de la iglesia de Santiago del Arrabal:
Santiago del Arrabal hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Aquí vemos la portada del Palacio de los Toledo, enfrente del Pasadizo de Balaguer:
Portada del Palacio de los Toledo hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Esta es la Iglesia de San Nicolás de Bari:
Puerta de la Iglesia de San Nicolás hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

El Convento de la Concepción Francisca:
Convento de la Concepción Francisca hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Aquí tenemos magistrales fotografías de patios toledanos:
Un patio de Toledo hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte
Un patio de Toledo hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

El Palacio de Inés de Ayala en la Plaza de Santa Isabel:
Palacio de Inés de Ayala en la Plaza de Santa Isabel hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Esta es la impresionante decoración mudéjar de la Casa del Arcedianato de Madrid en Toledo:
Casa del Arcedianato de Madrid hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Aquí un detalle de Palacio de Fuensalida:
Detalle del Palacio de Fuensalida hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Hay dos preciosas tomas de la orilla del Tajo y de sus lavanderas:
Orilla del Tajo y molinos hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte
Lavanderas en el Tajo hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Aquí tenemos la Casa del Diamantista:
Casa del Diamantista hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Estos son tres detalles de la Puerta de los Leones de la Catedral:
Aldaba de la Puerta de los Leones de la Catedral de Toledo hacia 1875.  Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte
Detalle de la Puerta de los Leones de la Catedral de Toledo hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte
Un detalle de la Catedral hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

El patio de la casa de la calle Santa Úrsula -hoy irreconocible- que es sede del Colegio de Arquitectos:
Detalle de la decoración de un patio en la Calle Santa Úrsula hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Un detalle gótico de la Iglesia de la Magdalena:
Detalle de la Iglesia de la Magdalena en 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Aquí vemos el sepulcro de los Condes de Mélito en el Convento de San Pedro Mártir:
Dos sepulcros en Toledo hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Aquí vemos la entrada a la capilla del Hospital Tavera:
Una puerta renacentista de Toledo hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Esta es la portada del Palacio de los Condes de Peromoro en su emplazamiento original en la Calle Instituto, muchos años antes de ser trasladada a la Audiencia Provincial donde hoy podemos verla:
Portada del Palacio de los Condes de Peromoro (hoy en la Audiencia) en su emplazamiento original en la Calle Instituto en Toledo hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de

Este es el patio de la casa que años después acogería el actual Museo del Greco:
Patio de la casa que hoy es el Museo del Greco hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Esta es una vista de la Basílica de Santa Leocadia:
Basílica del Cristo de la Vega hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Una magistral vista de un pintor junto a la Iglesia de San Bartolomé:
Pintor junto a la Iglesia de San Bartolomé hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

La Sinagoga del Tránsito:
Sinagoga del Tránsito hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte
Sinagoga del Tránsito hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Aquí vemos un mendigo en una puerta:
Un mendigo en Toledo hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Es preciosa y desconocidísima esta fotografía de un niño aguador:
Un niño aguador en Toledo hacia 1875. Fotografía de Casiano Alguacil © Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

Se trata sin duda de tesoros, en buena medida desconocidos, que poco a poco gracias a las técnicas de digitalización y apertura de las administraciones en lo referente a la accesibilidad de sus archivos vamos conociendo todos los interesados por el pasado de la ciudad. Una prueba más de que en lo relativo a la fotografía histórica de Toledo, el camino por recorrer para completar su conocimiento es aún muy largo.
Feliz año nuevo a todos.

sábado, 22 de diciembre de 2012

Las imágenes más nítidas de la torre mudéjar de la Iglesia de Santa Justa y Rufina

En mayo de 2010, rastreando tranquilamente una soberbia fotografía de Charles Clifford de 1857, tuve la suerte de toparme con algo que llamó mi atención: una torre que me resultaba extraña y desconocida.
Se trataba de la torre mudéjar de la Iglesia de las Santas Justa y Rufina, tal vez el más misterioso caso de desaparición patrimonial acaecido en el siglo XIX en Toledo, pues no existen -al menos que yo conozca- menciones a su derribo y sustitución por la actual espadaña, sucedido en fecha posterior a 1883.
Torre olvidada de Santa Justa y Rufina. Detalle de una fotografía de 1857 tomada desde el Valle por Charles Clifford
Torre olvidada de Santa Justa y Rufina. Detalle de una fotografía de 1857 tomada desde el Valle por Charles Clifford

Hoy tengo la alegría de poder mostraros imágenes realmente nítidas de esta torre hacia 1870, en superampliaciones de negativos de Jean Laurent custodiados por el Archivo Ruiz Vernacci de la Fototeca del Patrimonio Cultural de España, a cuyos responsables agradezco la cesión de estas imágenes para disfrute de todos.
La imagen en la que se aprecia mejor es esta panorámica poco conocida del genio galo:
Toledo hacia 1870. Fotografía de Jean Laurent.© Fototeca del IPCE, Negativo 03007

Al ampliarla aparece ante nosotros, majestuosa, la torre mudéjar fantasma, mencionada y dibujada en antiguos grabados pero de la que se pierde el rastro hace siglos pese a haber estado en pie hasta, al menos, 1883 (aparece en fotos de Alfred Dismorr de ese año). ¿Por qué nadie lamentó su derribo?, ¿por qué ni siquiera la prensa de la época lo cita?, ¿por qué se produjo su demolición? Son preguntas hasta ahora sin respuesta que tal vez pronto alguien pueda responder:
Actualización (1 de enero de 2013): gracias a las impagables aportaciones de Francisco García Martín, a quien todos debemos agradecer su generosidad, tenemos esta valiosa información (obtenida investigando archivos de la Junta Diocesana de obras) referida a la Torre de Santa Justa que transcribo a continuación.

Conocemos las intervenciones en este templo gracias a la intervención del Ayuntamiento debido a la situación de su torre, que hacía peligrar vidas y propiedades circundantes[1]. Ante el estado de la torre, Quinto de Resines, párroco de la misma, comunica el 7 de abril de 1866 al presidente de la Junta de Reparación de Templos el oficio del arquitecto municipal, en el que se indica que “...no obstante de hallarse denunciada por su estado de inminente ruina, tengo el honor de molestar de nuevo la atención de V.I. para que si lo estima procedente se sirva ordenar la necesaria, a fin de que por quien corresponda ejecuten en el plazo más breve posible las consiguientes obras de reparación, y en el ínterin que se estimen oportunas de apuntalado y apeos, a fin de evitar desgracias”, decretando que “si en el término de tercero día, no dispone lo concerniente que exige la Policía de seguridad publica, ínterin llevan a efecto las obras de reparación necesarias, esta alcaldía en virtud de sus atribuciones procederá con los operarios del Ayuntamiento al apeo y apuntalado de la referida torre, por cuenta y a cargo de quien corresponda; declinando desde ahora la responsabilidad de los siniestros que puedan ocurrir, dado su mal estado, en los que resultara ser culpable de que no tengan el debido cumplimiento mis repetidas ordenes"[2]

Diecisiete años después, el mismo sacerdote, junto con Fernández de Arrieta, cura ecónomo del templo, de nuevo escribe para decir que ha recibido comunicación del Sr. alcalde, en que hace presente “que por Arquitecto Municipal de la misma se ha denunciado como ruinosa la torre de la Iglesia parroquial de mi cargo. En su vista, habiendo sido reconocida por el Arquitecto Diocesano, parece ser cierto el estado ruinoso de dicha torre, para cuya demolición y reparación, haciéndola sin dar lugar a nuevos desperfectos, podrá vastar la cantidad de 4.940 pesetas, según dictamen del expresado arquitecto diocesano”[3].

Ya en 1888, el arquitecto Juan García Ramírez se vuelve a dirigir a la Junta realizando unas manifestaciones muy interesantes para el balance del momento:

“Por encontrarse en estado de ruina inminente, fue demolida, hace dos o tres años, parte de la torre de la iglesia parroquial de las santas Justa y Rufina de esta ciudad.
Pero con aquellas obras, autorizadas por el ministerio de Gracia y Justicia solo se consiguió prevenir parcialmente los daños que en personas y edificios colindantes, hubiera causado la ruina, si hubiera sobrevenido, pero de ningún modo, conjurar por completo los perjuicios graves que necesariamente han de ocurrir, si las cosas continúan en estado actual.
Digo esto, porque reconocida nuevamente la parte de la torre que aun subsiste, por invitación del Sr. cura propio de aquella parroquial, resulta hallarse en estado tal de ruina, que causa perjuicios gravísimos no solo al indicado templo, si que también a la casa señalada con los nºs 19 y 21 modernos de la calle de las Cordonerías.
Por esta razón, me atrevo a llamar la atención de V. Emcia. en asunto de tanta responsabilidad, para si lo estima oportuno, acuda al Ministerio de Gracia y Justicia, en demanda de que, puesto que se halla terminado el expediente de obras para la completa demolición y nueva construcción de aquella torre, se sirva acordar lo que considere más oportuno la Superioridad, a fin de evitar daños personales y materiales de mucha consideración, si no se acude tan perentoriamente como dejo indicado, a interponer los medios precisos para evitación de aquellos males”[4].

Debemos esperar, nada menos que hasta 1890, 24 años después de iniciado el expediente, para encontrar el desglose de las “cuentas del nuevo campanario de Santas Justa y Rufina"[5].

[1]: Julio Porres nos dice que un vecino, el escribano Pedro de Roa, construyó en 1861 la casa inmediata al ábside de la Iglesia. Historia de las calles de Toledo, op. cit. tm. III, pág. 1136.
[2]: ADTO, Reparación de Templos, Toledo, 33.14. Santas Justa y Rufina.
[3]: ADTO, Reparación de Templos, Toledo, 33.14. Santas Justa y Rufina. Toledo, 2 de mayo de 1883. Contestación a oficio de 26 de abril.
[4]: ADTO, Reparación de templos, Toledo, 39,3. Santas Justa y Rufina.
[5]: ADTO, Reparación de Templos, Toledo, 33.14. Santas Justa y Rufina. Toledo, 25 de junio de 1890.


Torre desaparecida de la Iglesia de las Santas Justa y Rufina hacia 1870. Detalle de una Fotografía de Jean Laurent.© Fototeca del IPCE, Negativo 03007
Torre desaparecida de la Iglesia de las Santas Justa y Rufina hacia 1870. Detalle de una Fotografía de Jean Laurent © Fototeca del IPCE, Negativo 03007

En esta otra toma, de 1872, aparece escondida pero la calidad de la imagen hace que merezca la pena mostrarla:
Torre desaparecida de la Iglesia de las Santas Justa y Rufina en 1872. Detalle de una Fotografía de Jean Laurent.© Fototeca del IPCE, Negativo 03003
Torre desaparecida de la Iglesia de las Santas Justa y Rufina en 1872. Detalle de una Fotografía de Jean Laurent.© Fototeca del IPCE, Negativo 03003

Esperando que disfrutéis de estas joyas de la arqueología fotográfica, sólo me queda desearos a todos de corazón una muy Feliz Navidad y un estupendo año 2013, así como agradeceros todo el cariño que estoy recibiendo estos días, tanto por la publicación del libro de Toledo Olvidado, como por el reciente premio de la Real Fundación de Toledo.
© TOLEDO OLVIDADO
Maira Gall