sábado, 4 de septiembre de 2010

Demetrio Ribes: un genio que fotografió Toledo en 1915

Considerado uno de los mejores arquitectos españoles de la historia, Demetrio Ribes Marco nació en Valencia en 1875. Se formó en Barcelona y en Madrid, interesándose por multitud de corrientes arquitectónicas de tendencia bien distinta como el eclecticismo, el modernismo, el regionalismo, el racionalismo o el secesionismo vienés.
Demetrio Ribes
Fusionando todas estas corrientes y siendo pionero en el uso de nuevos materiales como el hormigón, Ribes creó su propio estilo que destacó sobremanera en las grandes obras de carácter industrial de comienzos del siglo XX en España. No en vano, fue el arquitecto facultativo de la Compañía de Caminos de Hierro del Norte de España desde 1902 hasta 1921, donde le fue encomendada la creación de obras emblemáticas como los Edificios Gemelos de Príncipe Pío en Madrid (1907), la Estación del Norte de Barcelona (1912) o la Estación del Norte de Valencia (1917) que es hoy en día uno de los símbolos de la ciudad.
En paralelo diseñó multitud de edificios industriales y creó la "Sociedad Coloma y Ribes, construcciones en hormigón armado, Valencia". También diseñó tanto edificios religiosos como públicos, como la Casa de Correos y Telégrafos de Castellón y la plaza de toros de Játiva, destacando en todos ellos su gran funcionalidad y el empleo de materiales novedosos para la época.
En plena actividad creadora, en mayo de 1915, Ribes visitó Toledo con su cámara estereoscópica. Sin duda buscaba en Toledo edificios que le hicieran encontrar inspiración en sus eclécticas y personales construcciones. De esta visita nos ha llegado una serie de imágenes muy interesantes, conservadas hoy en día por la Generalitat Valenciana mediante la cátedra que lleva el nombre del arquitecto.
Desgraciadamente, Ribes falleció sólo seis años después de esta visita a Toledo, en 1921, a la temprana edad de 46 años.
Las imágenes toledanas de Demetrio Ribes muestran algunos de los edificios más emblemáticos de Toledo fotografiados con cámara estereoscópica (ya publiqué otra entrada sobre las mejores imágenes de este tipo tomadas en Toledo) que a buen seguro permitieron al arquitecto visualizar tranquilamente en su estudio los detalles más interesantes en tres dimensiones mediante el empleo de un estereoscopio. El más valioso de estos desconocidísimos documentos es esta imagen de la Puerta del Sol que tiene el valor añadido de estar tomada mediante la técnica del autocromo (que ya expliqué en otra entrada anterior) por lo que podemos verla con sus colores reales pese a ser de 1915 (pongo la imagen completa con el par estereoscópico y a continuación uno de ellos ampliado):
1-09-D. Ribes. Toledo. Puerta del Sol. Estereoscopia en color, placa 6 x 13 (procedimiento autocromo). Versión digitalizada. Mayo 1915. Colección Guillot-Ribes.
1-09-D. Ribes. Toledo. Puerta del Sol. Estereoscopia en color, placa 6 x 13 (procedimiento autocromo). Versión digitalizada. Mayo 1915. Colección Guillot-Ribes.

Este mismo monumento también fue fotografiado por Ribes en su flanco posterior, pero ya en blanco y negro:
1-08-D. Ribes. Toledo. Puerta del Sol. Gelatinobromuro sobre cristal (6 x 13); versión digitalizada. Mayo 1915. Colección Guillot-Ribes.
1-08-D. Ribes. Toledo. Puerta del Sol. Gelatinobromuro sobre cristal (6 x 13); versión digitalizada. Mayo 1915. Colección Guillot-Ribes.

Es muy interesante también la vista estereoscópica de la Iglesia de Santiago del Arrabal:
1-06-D. Ribes. Toledo. Iglesia de Santiago del Arrabal. Gelatinobromuro sobre cristal (6 x 13);versión digitalizada. Mayo 1915. Colección Guillot-Ribes.
1-06-D. Ribes. Toledo. Iglesia de Santiago del Arrabal. Gelatinobromuro sobre cristal (6 x 13);versión digitalizada. Mayo 1915. Colección Guillot-Ribes.

Demetrio Ribes se adentró en el interior de la Sinagoga de Santa María la Blanca para inmortalizar su interior:
1-07- D. Ribes. Toledo. Interior de Santa María La Blanca. Gelatinobromuro sobre cristal (6 x 13); versión digitalizada. Mayo 1915. Colección Guillot-Ribes.
1-07- D. Ribes. Toledo. Interior de Santa María La Blanca. Gelatinobromuro sobre cristal (6 x 13); versión digitalizada. Mayo 1915. Colección Guillot-Ribes.

El arquitecto valenciano también retrató la Mezquita del Cristo de la Luz:
1-04-D. Ribes. Toledo. El Cristo de la luz. Gelatinobromuro sobre cristal (6 x 13); versión digitalizada. Mayo 1915. Colección Guillot-Ribes.
1-04-D. Ribes. Toledo. El Cristo de la luz. Gelatinobromuro sobre cristal (6 x 13); versión digitalizada. Mayo 1915. Colección Guillot-Ribes.

Del mismo modo, Ribes fotografió el claustro del Monasterio de San Juan de los Reyes:
1-05-D. Ribes. Toledo. Claustro de San Juan de los Reyes. Gelatinobromuro sobre cristal (6 x 13); versión digitalizada. Mayo 1915. Colección Guillot-Ribes.
1-05-D. Ribes. Toledo. Claustro de San Juan de los Reyes. Gelatinobromuro sobre cristal (6 x 13); versión digitalizada. Mayo 1915. Colección Guillot-Ribes.

Para finalizar, unas líneas para agradecer infinitamente a Virginia García Ortells y a Inmaculada Aguilar Civera, responsables de la Cátedra Demetrio Ribes en la Universidad de Valencia, su amabilidad y excelente disposición para la difusión de este desconocido legado en Toledo.

6 comentarios

José María Moreno Santiago dijo...

Bienvenido de nuevo Eduardo, un placer volver a ver tus entradas. Precioso conjunto de pares que no conocía en absoluto.
Este hombre debía de estar a la última para hacer autocromos a los muy pocos años de ser inventados y además estereoscópicos, ¡genial!

Kászon Kovács dijo...

Hola Eduardo, curioso ver el jardín del Cristo de la luz tan repleto de hierbajos (en la primera foto). Luego en la foto del edificio de la ermita (quinta foto) parece que hay unas baldosas grandes apoyadas a la pared; quizás justo coincidió la visita de don Ribes con la época cuando cubrían el jardín con ellos?
Un abrazo, Kászon
Ps – tb para mi gran alegría volver a ver entradas tuyas después de la pausa del verano! Luego si se me permite una pequeña sugerencia para la nueva temporada, me haría muchísima ilusión ver lo que tengas de la Iglesia de san Andrés; que me intriga desde hace años y hay relativamente poca cosa sobre ello “out there”…

MARIBEL dijo...

¡¡¡ cuento te hemos echado de menos !!!. Me alegro mucho de tu regreso.

Anónimo dijo...

que bien.............ya has vuelto

Eduardo Sánchez Butragueño dijo...

¡Gracias a todos!
José María: en efecto, un autocromo estereoscópico era algo al alcance de muy pocos en 1915, de ahí el enorme valor de la imagen.
Kászon: tomo buena nota de tu petición.
Abrazos.

manipulador de alimentos dijo...

Gran entrada de nuevo!!!! Me encantan los autocromos... Un saludo!!!

© TOLEDO OLVIDADO
Maira Gall